Celebrando la vida de Betty Mathis
Betty Mathis, una querida miembro de la Iglesia Bautista Ox Hill, falleció rodeada de su familia el 6 de abril de 2025. La vida de Betty estuvo marcada por la fe, la generosidad y el amor inquebrantable por su familia y amigos. Enseñó en la Escuela Dominical a todas las edades y sirvió fielmente dondequiera que se estableciera. Conocida por su fortaleza serena y su espíritu bondadoso, la calidez y la bondad de Betty dejaron una huella imborrable en todos los que la conocieron. Lamentamos su fallecimiento, pero celebramos una vida plena y un legado de amor que perdura.
Recordando la vida de Betty Mathis
Betty Jane Creed Mathis, del condado de Berrien, Georgia, falleció pacíficamente tras una breve enfermedad el 6 de abril de 2025. Le sobreviven sus hijas, Amy Mathis (Charles Applegate) y Cindy Raba (Matt Raba). Betty tuvo tres nietos: Maddison (Nick), Brynne (Joe) y Bennett; dos yernos: Nick McComber y Joe Burkart; y un bisnieto: Jordan Mathis McComber. Le precedieron en la muerte su amado esposo de 57 años, Ron (Ronnie) Mathis; y sus padres: James Edward Creed y Annie Lee Futch Creed.
Tras graduarse de la Escuela Secundaria del Condado de Berrien con la mejor calificación, Betty y Ron asistieron y se graduaron del Colegio Estatal de Valdosta. Betty y Ron estaban tan enamorados que se casaron un año antes de graduarse. Betty se dedicó a la docencia por un breve tiempo antes de mudarse con su esposo para apoyar su carrera militar. Betty fue ama de casa durante muchos años, dedicando su vida y amor a su familia. Fue maestra de escuela dominical para todas las edades, desde preescolar hasta la universidad y la vida profesional. Cuando sus hijas crecieron, Betty regresó al mercado laboral como administradora de registros para British Aerospace. Continuó dedicándose a su familia, nietos y amigos, y continuó enseñando en la escuela dominical de su iglesia.
Betty se jubiló muchos años después y comenzó a dedicarse a su pasión por los viajes con su amado esposo. Juntos exploraron Estados Unidos, Grecia, Europa, África, Perú, las Islas Galápagos, el Caribe y Hawái, además de visitar su lugar favorito, Aruba, siempre que podían.
Betty siempre será recordada por su corazón generoso, su espíritu bondadoso y amoroso, su gracia y su serena fiereza.